miércoles, 3 de junio de 2009

I saw Calamaro



El domingo estuve en el Luna Park, viendo el concierto de Andres Calamaro!! Pagué unas entradas carisimas para hacerle un regalo a Luisa, que ya lleva tres semanas aguantandome en su casa y al final fui con una amiga suya. El papá de Luisa enfermó y lo tuvieron que operar de urgencia, así que ella pasó todo el finde con él en Corrientes. Felizmente ya esta bien, ya esta en casa y Luisa ha vuelto a Palermo.


El concierto empezó medio raro. Dicen que Andres es un poco tímido y le cuesta arrancar. Pues será eso, pero estaba como soso, como si no le viera nadie detrás de sus enormes gafas oscuras y el uniforme negro de rockero. Así estuvo como media hora de concierto, hasta que después de dos tangos acompañado solo al piano por Tito Davila, parece que empezó a entender que nos habíamos dejado los cuartos para verle y se lo empezó a currar.


El resto, fue rodado, lo tocó todo: Crimenes Perfectos, Carnaval de Brasil, Parte de Adelante, Gin Tonic, Estadio Azteca, Media Verónica, Paloma, Canal 69 y Flaca en el bis... integrando algunos momentos más tranquilos y algunos tangos y boleros versionados con las canciones más poperas, ups perdón, rockeras. Es gracioso porque no acabo de saber si a él, le gusta más lo uno o lo otro.


En el público, había mucha gente que adora al Calamaro más pop/rock; y otra que nos gusta el Andres tanguero, el melancólico y el filósofo. Al final ganaron los primeros, pero esto ya me ha pasado más veces, si te gustan los arreglitos y la voz afinada, ponte el disco pero no vengas a un concierto en el Luna Park. Lo sé. Porque en los conciertos se versiona taaaaantoooo a sí mismo? Si elegiste, o tu productor eligió, esa versión, no nos regales otra. La que elegiste era mejor. Y no nos mola que te inventes todas las canciones y las cambies tanto que no las podamos reconocer. Parece que el concierto lo daba el publico y Andres hacía una jam session.


Una vez asumido esto, me lo pasé muy bien, grité, bailé (en el espacio que me dejaba mi asientito) y me fui sudando a pillar un colectivo. Una buena noche.